Supongamos que estás pensando en comprarte un coche nuevo. Una compra que supone un gran desembolso. Queremos que el coche nos dure unos cuantos años, que el gasto durante su uso no sea excesivo, que sea un coche seguro.
Después de mucho mirar, te han llamado la atención los coches eléctricos, o bien te lo ha comentado algún amigo, o algún anuncio en la tele, perfecto, pero no debemos salir corriendo al concesionario sin saber antes una serie de cosas importantes sobre el coche eléctrico.
Primeramente hemos de saber a grandes rasgos qué es un coche eléctrico y qué variantes de coche eléctrico existen.
Cuando hablamos de coche eléctrico nos referimos a un automóvil que se mueve gracias a un motor eléctrico, cuya energía queda acumulada en una batería recargable, la cual se puede recargar enchufándola a la red eléctrica al igual que lo haces con tu teléfono móvil. Esta es no la única manera de recargar tu batería, también se recarga con lo que se llama frenada regenerativa, mediante la cual al levantar el pie del acelerador o pisar el del freno, se regenera energía que carga parcialmente la batería.
A nivel internacional es lo que se conoce mediante las siglas BEV (battery electric vehicle) y que también podemos llamar coche 100% eléctrico, ya que es un vehículo que sólo funciona mediante electricidad
El coche híbrido es un coche en el que se combinan dos o más motores que utilizan energías diferentes. En los coches híbridos enchufables, ambos motores participan en el movimiento de las ruedas, o bien por separado o bien a la vez. A nivel internacional se conoce con las siglas PHEV (plug-in hybrid electric vehicle). Estos coches tienen uno o varios motores eléctricos con su batería recargable y un motor de combustión, de gasolina o diésel. La batería es mucho más pequeña y con menos autonomía que los coches eléctricos 100%.
Lo que se intenta con los coches híbridos enchufables es tener en un mismo coche dos cosas muy importantes: gran autonomía y facilidad de repostaje (diésel o gasolina) y a la vez tener la posibilidad de circular en modo eléctrico durante un buen número de kilómetros (con motor eléctrico).
Coches hibridos a secas son los coches que no tienen posibilidad de recargar la batería en una toma de corriente sino que su batería se recarga con la frenada regenerativa.
Antes de comprar un coche eléctrico tenemos que tener presente que vamos a necesitar un punto de carga para recargar nuestra batería. Esto nos obliga a que dispongamos de una plaza de aparcamiento que usemos de manera exclusiva, ya que nuestra batería tardará en cargarse de 4 a 12 horas. Actualmente existen pocos puntos de recarga en la calle por lo que lo mejor sería disponer de tu propio cargador en tu plaza. Puede ser una plaza privada o una plaza en un garaje comunitario, o incluso un aparcamiento en el trabajo si tu empresa es de las que está concienciada con adaptarse a la nueva movilidad.
Si es un garaje comunitario, La Ley de propiedad Horizontal establece que no es necesario que la Comunidad apruebe la instalación: sólo hay que notificarlo
La persona interesada correría con los gastos y la instalación ha de realizarla un instalador electricista autorizado cumpliendo la normativa vigente (el REBT, y concretamente la ITC-BT-52). Hay varias maneras de realizar esta instalación: Puedes realizar una derivación desde el contador que ya tienes para tu casa, también puedes realizar una derivación desde el contador del garaje (añadiendo un contador para saber lo que has consumido) o puedes hacerte con un nuevo contador y una nueva línea de suministro, específica para el punto de recarga de tu coche.
Has de saber que cuando hablamos de punto de carga, nos estamos refiriendo, o bien a una toma de corriente de tipo doméstico de hasta 16A que se conoce como Schuko o bien a una toma específica para coches eléctricos, que puede ser de mayor potencia de recarga.
Los tipos de recarga también llamados Wall-box son de tipo mural. Los de poste los verás más en la calle
Existen dos tomas de corriente: Tipo 1(Yazaki) o Tipo 2 (Mennekes), para usar el cable que llevarás en tu coche eléctrico o bien el Wall box puede incluir una manguera con el conector adecuado para tu coche, y así no tienes que sacar el cable.
El estándar para el conector de recarga de coches eléctricos en Europa es el conector Tipo 2, Mennekes (o VDE-AR-E 2623 -2-2).
Una cosa que has de saber es que no todos lo coches eléctricos llevan el puerto de carga con el conector Tipo 2, los hay que vienen con el Tipo 1. No pasa nada porque el cable de recarga que lleves en tu coche será el que sirva para tu coche (un extremo con conector Tipo 1 y el otro extremo con conector Tipo 2 o conector Schuko).
Conector Standard en Europa- Tipo Mennekes
Si tenemos planeado hacer algún viaje, contamos también con la posibilidad de una recarga rápida de la batería en una estación de recarga de uso público. Cuando hablamos de recarga rápida estamos hablando de una potencia alrededor de 50 KW, mientras que la normal que realizamos en casa suele ser de 3,6 Kw a 16 A, aunque puede variar entre 2,3 (10 A) y 6,6 Kw (32 A), dependiendo del cargador integrado en el coche del conector empleado y de la potencia contratada en la casa y que llegue al Wall-box
Con la recarga rápida, el coche en 25 o 30 minutos está listo. Se recomienda solo de manera ocasional (viajes o alguna urgencia imprevista). Si utilizamos la carga rápida muy frecuentemente, las baterías se deterioran algo más rápido que con las recargas normales. También tendremos que tener en cuenta que recargar en la calle es más caro que hacerlo en casa. La carga en tu domicilio, para una batería con una autonomía de 100km, puede ser de 1€ aproximadamente con las tarifas que hay actualmente, con lo que el ahorro es muy importante.
Con toda esta información, ahora ya puedes echar un vistazo a los distintos coches eléctricos que ofrece el mercado y decidirte por el que más te guste